viernes, 24 de julio de 2009

2010, EL GRITO DEL HARTAZGO

Ni partidos políticos, ni gobiernos, muestran sensibilidad en torno de la dimensión de la crisis; la sorpresa que traerá consigo el emblemático 2010 se anuncia en el grito del hartazgo, que no quieren escuchar. Las elecciones pasadas empezaron a trasmitir ese hartazgo y la manifiesta incapacidad del sistema de partidos para sacar lecciones del abstencionismo político, del voto nulo, del voto de castigo que fue también el voto con esperanza en cambios drásticos de las políticas públicas, se muestra en los conflictos internos por los que atraviesan el PAN y el PRD, tanto como en la falta de un programa de gobierno sustancialmente diferente del PRI, que parece embebido en su triunfo electoral. Como era de esperarse, la carrera por la candidatura presidencial nubla el horizonte de la vida política nacional. Mientras la Presidencia de la República busca afanosamente reproducir su modelo de operación política y sobre todo, la continuidad a toda costa del modelo económico orientado a la exportación, las fracciones de todos los partidos afinan sus estrategias para seguir beneficiándose del sistema partidocrático.

Ana Lilia Pérez, ofrece un panorama: “2010: la depresión que viene”, en el que recoge opiniones expertas sobre el negro futuro económico: pérdida del poder adquisitivo por el incremento real del 49 por ciento de la canasta básica (Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados) Se perderán en promedio 1 millón de empleos formales este año. Cada día, casi 2 mil 800 mexicanos pierden su empleo. En la industria del transporte, el desempleo llega al 21.1 por ciento. La remuneración promedio para los trabajadores que aún tienen empleo, se contrae severamente. La moneda se devaluó en más del 50 por ciento en el mercado cambiario con respecto del dólar, al pasar de 9.94 pesos por dólar el 8 de agosto de 2008 a 15.35 pesos por dólar el 11 de marzo de 2009; aunque el peso comenzó a ganar terreno lentamente, su depreciación se ha mantenido en más del 40 por ciento.

El Banco de México, estima que la caída del PIB será del menos 10 por ciento, en 2009, el peor desempeño de Latinoamérica. Sin medidas anticíclicas, la crisis impedirá que millones de mexicanos puedan mejorar su calidad de vida. Incluso los que tienen ingresos regulares, pueden caer en la pobreza, y para los millones en pobreza extrema, su situación se agravará aún más. Durante 2010, la posición fiscal del país se verá aún más deteriorada ante la dependencia presupuestaria de los ingresos petroleros, la ausencia de ahorros fiscales significativos y una baja base tributaria no petrolera. Como consecuencia directa de la crisis económica y el desempleo en Estados Unidos, en mayo pasado México registró la caída del 19.8 por ciento en el envío de remesas –la principal fuente de divisas después del petróleo. Además, los ahorros de los migrantes cayeron en promedio de 4 mil 600 dólares en 2007 a 3 mil 500 dólares en 2008, y a 2 mil 500 dólares en 2009. Al mes de mayo, la cartera vencida por tarjetas de crédito sumaba 33 mil millones de pesos (MDP). La de crédito a la vivienda, 300 mil MDP; la cartera de crédito al consumo, 426 mil MDP

Felipe Garrido, proyecta un libro “EL GRITO: repensar el país”, que se propone: “2010 debe propiciar el análisis, la crítica y el planteamiento de respuestas. Como nunca antes, la ocasión es propicia no para la celebración, sino para la reflexión, el diagnóstico y el diseño de nuevos derroteros. ¿Dónde hemos tropezado? ¿Por qué no hemos sido capaces de darnos el país que queremos tener? ¿Qué nos hace falta para construirlo? ¿Tendremos la energía, el talento, los saberes necesarios para lograrlo?”

No hay comentarios:

Publicar un comentario